Vuelve a mí, aire,
regálame tu brisa,
devuélveme la risa
y deja que tu caricia veraniega
rodee con maña mi cintura
sin pausa pero sin prisa.
Vuelve a susurrar bajo mi almohada
letras de canciones en inglés,
muéstrame la vida sin colores
con pelos y señales, sólo grises,
tal y como tú la ves.
No me niegues los sueños,
no me mates la ilusión,
miénteme cuando soples a mi oído
un “te quiero”, aunque no sea para mí,
aunque no sea tu intención.
Corta el tiempo y el espacio
que separan tu presencia en mi recuerdo,
de esta miserable vida
que ya no entiendo sin ti,
corta las amarras que ligan
tu adiós a mi memoria
con el certero filo de una hoja bisturí.
Vuelve a mí, aire de mayo,
viento sin sayo que vives y reinas,
soberbio y majestuoso,
sin echar de menos mi rostro
ni el bálsamo de mis versos,
siempre tan lejos de mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario