HOY HE PISADO EL ASFALTO
Hoy he pisado
el asfalto
y he recorrido
tus calles de nuevo,
he cruzado con
luz verde
midiendo los
pasos,
de semáforo en
semáforo,
te he buscado
entre la gente, como ayer,
abandonando
ese instinto primigenio
de hacerme la
encontradiza
cuando paso
por tu barrio.
Hoy duré más
que antaño,
caminando, sin
detenerme un minuto
para tomarme
un café,
he visto
recortarse mi figura en un trasluz,
mi imagen
depauperada
como vid
estéril, arrugada,
frente a un
escaparate…
y no me he
reconocido.
Hoy quise ser
lo mismo que perdí
y he luchado
contra el suelo,
clavando con
saña mis suelas,
por no
celebrar con risas
la dicha de
esos extraños que me miran
ajenos a vivencias
y recuerdos,
no parecen
darse cuenta
que lo que en
ellos es fiesta
para mi tan
sólo es duelo,
para mi tan
sólo es daño.
Hoy ya no
siento aflicción ni desencanto,
sólo me siento
más vieja,
mientras que a
ti te presiento
lleno de vida,
perfecto.
Y es que el
cielo no es el mismo
ni las calles
son doradas,
los bares no
están calientes
y los árboles,
que nunca prestaron
su sombra al besarnos,
aburridos de
aguardarnos se han helado.
Hoy he paseado
los sitios donde te vi,
donde nació
una ilusión,
la que después de perderte murió
lo mismo que yo morí.
lo mismo que yo morí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario