Hoy, Día de la Mujer Trabajadora. Ayer, vísperas, magnífica tarde de sol para pasear o sentarse en una terraza. Temíamos que por ese motivo no fuese a responder el público a la llamada del Mosquera para vernos dar la talla (Hoy voy a dar la talla). Pero sí lo hizo. El numeroso público que acudió, entrañable, cariñoso y entregado, salió encantado a tenor de sus comentarios y sobre todo de sus aplausos y piropos -aplaudiendo hasta en seis o más ocasiones a lo largo de la obra-. Un día de esos para archivar en la memoria -afortunadamente con la talla hemos tenido ya varios de esos días-. Ahora, con ánimo renovado para afrontar el estreno que se avecina el próximo sábado (Llámame Alondra), sólo cabe agradecer su complicidad al estupendo público de ayer, y la oportunidad que nos brinda otro año más la Concejalía de Participación Ciudadana de hacer llegar a distintos puntos de Valladolid, en la programación destinada al Día de la Mujer, nuestros montajes con claro contenido femenino.
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